
Hoy voy a dedicarle este artículo a Salamanca, mi tierra, os vamos a mostrar las 50 cosas que todo salmantino y todo aquel que quiera convertirse en uno, tiene que ver y hacer en Salamanca una vez en la vida.
Hay muchas de las cosas que todavía no he hecho, así que os animo a descubrir todo los rincones de Salamanca y que propongáis alguna otra, a ver si llegamos a ampliar la lista hasta los 100.
1. Quedar con tu pareja en el reloj de la plaza Mayor. Sin duda uno de los principales lugares de Salamanca donde quedar con tus amigos o con tu pareja. En el sitio más socorrido y el que todo el mundo elige para quedar.

2. Tomar un helado en el Café Novelty. Situado en la plaza Mayor es una de las cafeterías de Salamanca más famosas y la más antigua de la ciudad.
3. Visitar la catedral. Es uno de los monumentos más importantes de la ciudad y una de las cosas imprescidibles que ver en Salamanca. La catedral aunque no lo parece, no es una, sino que son dos, la catedral nueva y la vieja, que están unidas. La catedral vieja data de los siglos XII y XIII en estilo románico y la nueva adosada a la vieja fue construida entre los siglos XVI al XVII con un estilo que va del gótico tardío, renacentista y barroco.

Más información
- Precio: 5 € general / 4 € estudiantes / 3 € niños (hasta 16 años)
- Horario: Abril a septiembre de 10:00 a 20:00 / Octubre a marzo de 10:00 a 18:00. Martes de 10:00 a 12:00 entrada Gratis
- Web: https://catedralsalamanca.org
4. Pasear con tu pareja por el huerto de Calixto y Melibea. Este jardín urbano es uno de los rincones más románticos que ver en Salamanca. Su nombre hace referencia a los protagonistas de la historia de amor del famoso libro de Fernando de Rojas «La Celestina«.

5. Poner un candado en el pozo del huerto de Calixto y Melibea. Una de las tradiciones, que vemos en muchos puentes del mundo, es la de poner un candado en señal de amor. Aquí, como no podemos ponerlo en el puente de piedra lo ponemos en el pozo.

6. Visitar el museo de Art Nouveau Art Déco en la Casa Lis. Este precioso edificio alberga el Museo de Art Nouveau Art Déco de Salamanca, aunque no te guste el arte moderno, es uno de los museos más bonitos que ver en Salamanca. La entrada vale 4 € normal y 2 € estudiantes, los jueves por la mañana es gratis.

7. Pasear a los pies de la muralla. Desde la Casa Lis podemos ver los restos de la antigua muralla de la ciudad que llega hasta el cruce con la calle San Pablo.

8. Comerte unos cacahuetes en el bar Tío Vivo. Es uno de los bares más originales de Salamanca, tiene una decoración atípica, mitad feria (con caballitos de un tío vivo) mitad estudio de cine con grandes focos y un proyector. Buen ambiente y buena música. Al fondo del bar hay un arcón con cacahuetes del que puedes comer todos los que quieras.

9. Tomarte un batido de frutas o una tarta en el Mándala. Siempre que vengo a Salamanca me paso a tomar algo al Mándala, tienen también comidas, pero yo prefiero tomar un batido de frutas y un trozo de tarta, ya que tienen un montón de tartas diferentes para elegir. Sin duda una de las experiencias únicas que hacer en Salamanca.

10. Entrar en la discoteca Cum Laude con zapatillas. El Cum Laude es una de las discotecas más grandes de Salamanca, y la que más ambiente tiene. Tiene el mayor aforo de la ciudad, con dos plantas, pista y reservados. Por lo que si quieres salir de fiesta por la ciudad seguro que terminarás aquí.
11. Tomarte un diablo rojo en La Chupitería. La Chupitería de Salamanca, es otro de los míticos bares de noche de la ciudad. Aquí tienen 50 sabores diferentes, entre ellos uno de los más conocidos el diablo rojo. Así que si quieres disfrutar de un ambiente informal este es tu sitio.
12. Encontrar la rana y la calavera en la fachada de la Universidad. La calavera con una ranita encima se encuentra en la fachada de la Universidad de Salamanca. Era costumbre por los estudiantes el buscarla con idea de que al encontrarla les traería suerte con los exámenes. Hoy día es lo primero que hacen los turistas en Salamanca cuando llegan y uno de los suvenires más comprados.

13. Encontrar en el pórtico de la Catedral al astronauta. No es que los escultores de la Catedral fueran unos visionarios, sino que en sucesivas restauraciones de la fachada, los escultores decidieron tomarse algunas licencias en sus obras como marca personal. (Modo Dios: encontrar también un lince, un toro, un dragón con un helado de tres bolas que está sonriendo, un cangrejo de río, una cigüeña y una liebre; tendrás diversión para rato)

14. Deja un post-it en la pared del Pancake café & té. Antes de que llegará el Starbuks a España nosotros teniamos Pancake café & té (Calle de la Compañía, 18), donde pedir un café para llevar. No te pondrán tu nombre en él, pero tienes toda una pared donde puedes dejar un post-it con tu experiencia. Siempre que encuentres un hueco, ya que después de tantos años, la pared está llena.

15. Ir a comprar al Zara de la plaza del Liceo y admirar la cúpula del antiguo convento. No es que Zara nos haya pagado por esta promoción, sino que es porque la tienda se encuentra dentro de lo que fue un antiguo convento. Una de las cosas curiosas que puedes ver en Salamanca que no lo verás en el Zara de Callao.

16. Mirar la casa de muñecas de la Posada de las Ánimas. Otra de los locales de ocio míticos de Salamanca. Con una decoración peculiar, por un lado casas de muñecas y por otro, calaveras, es un lugar ideal para tomar copas.
17. Visitar el museo de la automoción. El museo de la automoción es otro de los museos que ver en Salamanca. Fue el primer museo público de España dedicado al mundo del motor. Inaugurado en 2002, cuenta en sus fondos con más de 200 automóviles históricos, algunos únicos, como Rolls-Royce, Cadillac, BMW,…

18. Subir a las torres de la Catedral. Si no tienes miedo a las alturas, es una de las experiencias únicas que hacer en Salamanca, y las vistas son espectaculares.

Más información
- Precio: 3,75 € Adultos / Grupos (+20) 3,25 €. Martes de 10:00 a 12:00 entrada Gratis.
- Horario: Enero a febrero de 10:00 a 18:00 / Marzo a diciembre de 10:00 a 20:00.
- Visitas Guiadas Nocturnas: Viernes y sábados, entrada 6 €
19. Tomar una tapa en cada uno de los bares de la calle Van Dyck. La calle Van Dyck, es la principal calle de vinos de la ciudad, también conocida como la senda de los elefantes, ya que después de tomar una cerveza y una tapa en cada uno de los bares de la calle tendrás que irte directamente a dormir.
20. Mirar las calaveras de la fachada de la Casa de las Muertes. Debe su nombre a las calaveras situadas en las pilastras de las ventanas superiores del edificio, aunque hay leyendas que aseguran que esta macabra denominación procede de una serie de extrañas muertes ocurridas en su interior a comienzos del siglo XIX.

21. Adivinar debajo de que concha se esconde el tesoro de la Casa de las Conchas. La famosa Casa de las Conchas esconde una bonita leyenda que dice que dentro de una de ellas, se esconde el mapa de un tesoro.

22. Ir de compras por la calle Toro y Zamora. Después de un día de visitas monumentales no hay nada mejor para una chica que irse de compras por las calles más comerciales de Salamanca.
23. Merendar un buen hornazo a orillas del Tormes en el Lunes de Aguas. Una de las tradiciones, más arraigadas para los salmantinos, que se realiza el lunes siguiente al Lunes de Pascua. Según cuenta la tradición, durante la cuaresma las prostitutas tenían que irse al otro lado del río y tras la Semana Santa las rameras regresaban a la ciudad, por lo que los estudiantes organizaban una grandísima fiesta, y salían a recibirlas a la ribera del Tormes con gran júbilo.

24. Hacer magia negra en la cueva de Salamanca. Según la leyenda, el mismo diablo daba clases de nigromancia aquí a siete alumnos durante siete años. Pasado este tiempo, uno de ellos tenía que quedarse con él como pago. El Marqués de Villena fue uno de sus alumnos y cuando tuvo la mala suerte de ser el elegido por Satanás huyó, perdiendo su sombra en la huida, hecho que le hizo permanecer señalado el resto de su vida.

25. Dar un paseo por el claustro del Convento de San Esteban. Si ya de por sí es bonita su fachada, no te digo como es su interior. Podemos decir que su claustro es uno de los más bonitos que vas a ver en Salamanca, y eso no es poco.

26. Subir a las torres de la Clerecía. En 2012 por fin se abre al público la torre de la Clerecía, de igual forma que la subida a las torres de la Catedral, es una de las mejores vistas que se pueden ver en Salamanca.

Más información
- Horario: de diciembre a febrero de 10:00 a 18:00. De marzo a noviembre de 10:00 a 20:00
- Precio: 3,75 € Adulto/ 3,25 € Grupo mas de 20. Martes de 10:00 a 12:00 entrada Gratis
- Web: Turismo de Salamanca
27. No haber cogido nunca el autobús porque todo está cerca. Una de las ventajas que tiene Salamanca con otras ciudades como Madrid, que ir a cualquier lado se puede hacer andando. En el tiempo que viví en Salamanca nunca tuve que coger el autobús para desplazarme y no vivía en el centro.
28. Ver Salamanca desde el puente romano. Cuando vengo en coche a Salamanca desde mi pueblo, la primera vista que tengo de la ciudad, es la que tenemos desde el otro lado del puente. Como podéis ver con la Catedral en su máximo exponente. Al atardecer con todo iluminado es una de las vistas más bonitas de la ciudad.

29. Saber la relación del Verraco del Puente romano con el Lazarillo de Torres. La ciudad de Salamanca está muy relacionada con el Lazarillo de Torres, y esto se lo debemos a nuestro Verraco, que fue el protagonista de una de las aventuras de este personaje.

30. Fotografiar la fachada del Palacio de San Boal. El Palacio fue construido en el siglo XV a la vez que el Palacio de Arias Corvelle, junto al que formaba un solo edificio. En el siglo XVIII el marqués de Almarza, dueño de la construcción, decidió separar el palacio en dos. De esa reforma datan esta peculiar fachada esgrafiada y los balcones.

31. Visitar el sepulcro del Arzobispo Alonso de Fonseca en el Convento de las Úrsulas. Fundado a finales del siglo XV por Sancha Maldonado. Años más tarde, en 1512, el Arzobispo Fonseca impulsó la ampliación del convento, con el fin de que acogiera su capilla funeraria. El arzobispo consiguió su objetivo, ya que su imponente sepulcro de mármol sigue hoy en el centro de la iglesia, junto a la capilla mayor.

32. Visitar el yacimiento arqueológico del Cerro de San Vicente. Este enclave acoge los restos del primer poblado estable de la ciudad, en la Edad del Hierro.

33. Admirar la pintura «El Cielo de Salamanca» en el Museo de la Universidad. Esta pintura era parte de una obra pictórica que decoraba el techo de la Biblioteca de la Universidad. Su autoría está atribuida al pintor Fernando Gallego y data de finales del siglo XV. Permaneció oculta sobre una bóveda durante años, hasta que en los años 50 fue encontrada, restaurada y trasladada al Museo de la Universidad donde hoy podemos verlo.

34. Visitar la Casa-Museo de Unamuno. Fue construida por Andrés García de Quiñones en el siglo XVIII como residencia de los rectores de la Universidad. Es por eso que Unamuno vivió aquí durante el tiempo que fue rector (1900-1914). Hoy se ha convertido en un museo dedicado a su memoria.

35. Callejear por Salamanca y toparte con la torre del Clavero. Se construyó en el siglo XV como parte del Palacio de don Francisco de Sotomayor, que era Clavero Mayor de la Orden de Alcántara (la persona encargada de custodiar las llaves de las fortalezas y del archivo de la Orden).

36. Entrar en el Palacio de la Salina y descubrir que la entrada es gratuita. Fue construido por don Rodrigo de Messía (Señor de La Guardia), como mansión señorial, aunque también fue depósito de la sal, de ahí el nombre de «Salina». Hoy en día acoge la sede de la Diputación Provincial.

37. Ir al centro y tardar como mucho 10 minutos. Cuando en Madrid digo que voy al centro, me lleva entre metros y cercanías casi una hora el llegar. Cuando estaba en Salamanca el quedar en el centro solo me suponía 10 minutos, y es algo que he perdido con el cambio.

38. Realizar la ruta de los murales del Barrio del Oeste. Si quieres descubrir esta ruta tienes toda la información es este post que escribimos: Ruta de Arte Urbano: el Barrio del Oeste de Salamanca

39. Ver una película de estreno en los cines Van Dyck. Antes de que existiera Nexflix los salmatinos nos íbamos los fines de semana a ver una película a los cines Van Dyck. Hoy todavía perduran estos míticos cines de la ciudad.
40. Ir de tapas por las casetas en las fiestas de la Virgen de la Vega. Las casetas en el centro de la ciudad son uno de los atractivos de estas Fiestas que se celebran el 8 de septiembre. Casetas en las que tanto los locales como los turistas, pueden disfrutar de los pinchos típicos desde el mediodía hasta la noche de manera ininterrumpida.
41. Ver subir al Mariquelo a lo alto de la Catedral. Otra de las fiestas salmantinas, tiene que ver con el Mariquelo, que subía cada año a la torre de la Catedral Nueva de Salamanca, en agradecimiento a Dios porque el terremoto de Lisboa de 1755 no había causado víctimas ni daños a la Catedral. Esta tradición se ha mantenido de forma ininterrumpida desde 1755 hasta hoy.
42. Pasear por el Convento de las Dueñas. Entre los muchos monumentos que tiene Salamanca, merece una especial atención el Convento de las Dueñas, en particular su claustro, situado en un entorno monumental incomparable junto al convento de San Esteban.

43. Dar de comer a los patos en la Alamedilla. Desde hace años el parque de La Alamedilla ha sido un lugar de ocio para las familias salmantinas gracias a su parque y su estanque, que alberga a los patos que ya son el símbolo del parque. Y uno de los pasatiempos que ya es tradición, es dar de comer a los patos con pan o con gusanitos, una práctica que a pesar de estar prohibida, es muy habitual todos los días.
44. Tener un botón Charro y una ranita de la suerte. El botón charro, una joya de filigrana, se ha convertido con el paso de la historia en uno de los símbolos más característicos de los salmantinos, aunque su uso más característico y apropiado lo podemos ver en los diferentes trajes charros, que forman parte del traje típico de los diferentes pueblos de la provincia.

45. Sentarse en los jardines de Anaya. Justo enfrente del Palacio de Anaya, tenemos estos jardines, donde los estudiantes se reunían después de las clases, o incluso para hacer «pellas».

46. Quedar con los amigos en el Toscano. Es un mítico bar salmantino, que desde siempre ha sido un punto de encuentro de tantos amigos. Era famosa la frase salmantina «a las 10 en el toscano».
47. Descubrir el Pozo de las Nieves. Uno de los último elementos patrimoniales que se unen a la ciudad. Construido en el siglo XVIII como parte del antiguo Convento de San Andrés. Su función era la de almacenar y conservar la nieve, que era transportada hasta aquí desde la Sierra de Francia y de Béjar, y que era convertida en hielo para darle distintos usos.

48. Pararte a mirar en la “esquina de los tres coños”. Justo en el punto donde se cruzan la Calle de la Compañía con la Rúa Mayor se halla un rincón donde muchos turistas y los mismos salmantinos se paran para disfrutar de la vista, y que se llama popularmente la ‘Esquina de los tres coños’. Esto es debido a la exclamación “¡Coño, qué bonito!” al ver por un lado la Clerecía y al girarse a la Casa de las Conchas. Y el tercero, pues al llegar al final de la calle, y asomarnos a la Rúa, debido al gélido invierno charro, exclamaremos… “¡¡Coño, qué frío!!”

49. Ver todos los monumentos iluminados por la noche. Si ya es bonita la ciudad de día, no te digo como está cuando llega la noche.

50. Y antes de irte, comprar un hornazo para llevarte a Madrid. Y para que te lleves un buen sabor de boca de la ciudad, no te olvides de comprar un hornazo para el camino. Y luego di en tu casa lo bien que te lo pasaste en Salamanca, porque el que viene repite.
Más información
Turismo Salamanca: https://www.salamanca.es
Dónde dormir
Si quieres descubrir todas las cosas chulas que puedes hacer en la ciudad de Salamanca, aquí tiene los mejores alojamientos para que tu visita sea de diez:
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Me gusta mucho lo que estais haciendo, lo digo en plural por la compañera que llevas. He estado viajando por estas rutas que nos estás aportando, y no he llegado a ver ni la décima parte de ellas. Gracias y seguir así. Un saludo de un amigo
Tomar una guinda en el Bolero
Y si no quieres morir, mejor unos verdes, jeje.
probar los mejillones del llamas
Sentarse minutos indefinidos en el suelo de la plaza mayor a tomar un heladico o porque sí, como si fuera eso una playa o un parque 🙂
Ver todos los monumentos de día e iluminados por la noche con y sin niebla
Hace años que desgraciadamente vivo fuera de mi Salamanca pero si aún siguen abiertos, tomarse unos litros en libreros, comerse unas bravas en el Segundo o en La nueva, y pasear por el parque de los jesuitas
todo lo he hecho
solo me falta volver
y pasar por studebaker
Pararte en la «esquina de los tres coños»
Me encantaría saber a que llamas la esquina de los tres coños.
Soy salmantino y nunca lo he oído. Gracias por vuestro trabajo
Gracias a ti por leernos, yo también soy Salmantina y no lo conocía, fue una aportación de uno de los lectores, así entre todos vamos descubriendo cosas nuevas.
Los tres coños: coño qué casa, coño qué iglesia, coño qué frío. ¿Os suena qué esquina es?
Comer en Casa Paca junto a la plaza mayor no se puede olvidar
Menes no es así, es: coño qué alto, coño qué bonito y coño que frío.
La esquina de los tres coños está en la callecita que va de la calle libreros a la misma puerta de la catedral. Y es: «Coño qué alto», «Coño qué bonito» y «Coño qué frío» (porque siempre sopla muchísimo aire)
no dejar de comer en restaurante Los Arcos en Km.8 da la autovia Salamanca -Zamora. Relacion calidad precio INMEJORABLE.
Echarse un futbolín en el Manila o en el Pani, tomarse un botellín en el Bolero, echarle un euro a Michael, el violinista de Salamanca (y sí, un euro, no me seáis rácanos, que mucho nivelón para atreverse a entrar al Tío Vivo a tomarse algo, que es más caro que San Sebastián, pero al pobre hombre ni las migas), driblar a Mayuda para comer que tengo hambre tengan compasión por favor, hacer como que estudias en Zacut, ir solo al Alcaravan con un libro y tirarte el rollo de intelectual, mirar dentro de las celdas del DA2, hacer ejercicio en los Jesuitas, robar algo en el carrefour express de la calle toro, aplaudir en la plaza mayor cuando encienden las luces por la noche, por supuesto comerse una chanfaina en el Chan un domingo de rastro, hacer sonar las llaves en la Alamedilla y correr por si acaso, cenar en el Gemas (que ya no es lo que era, pero bueno, las patatas del Segundo tampoco y ahí están…), comprar un pastel de Gil, y sentir vergüenza ajena al ver el medallón de Franco… Ahí van mis quince.
El carrefour express de calle toro, previamente llamado champion, y previamente el Simago: simaNgo no compro
tomar un hamburguesa en leonardo cerca el cum laude
Decir oooooooooooohhhh cuando estas en la plaza mayor y encienden las luces
Conocer el teatro Liceo. Una maravilla.
Comer patatas del segundo… Vivir una nochevieja universitaria… Ir al en vivo a por café gratis y hablar en inglés… El chupito mamada de la chupitería… Salir del Atahualpa e ir a por un kebab en el clandestino ese y entrar gritando namasteeeee!!!!
Eres un tio.
He realizado todo menos la maratón, pero ya no puedo con ella.
Se feliz.
Salir a «dar una vuelta» por la ruta de rigor: calle Toro, Plaza Mayor y vuelta por calle Zamora.
Comprar (y comer) un pastel de Gil.
Decir «ohhh» y aplaudir cuando se encienden las luces de la Plaza Mayor y te pilla enmedio.
Ver las horas pasar sentado en las escaleras del Palacio de Anaya.
Dar una vuelta por el Paseo Fluvial.
Está genial!
Agregaría nochevieja universitaria, poner tu nombre en la pared del Paniagua, ver las calles decoradas en navidad, un diablo verde en la chupiteria, recibir un corazón de kandhavia
Escuchar cantar a la Tuna en la Plaza Mayor
La de poner el candado, por favor, NO ! Es una horterada, que además daña elementos patrimoniales…pero sobre todo es una horterada de cuidao…
Falta ir a comer «El farinato» en el Bernardo. «los mejillones…» en el corrillo. «las palomas» en el Cervantes. Sacar un libro de la biblioteca del parque San Francisco en verano. Ir a «una tienta» en Rodas Viejas. Estos son parte de mis recuerdos después de 40 años fuera de mi Salamanca.
Hacer cola en verano en el Le Mans para comerse una hamburguesa, tomarse «un rápido» en el Bolero, entrar en el baño del Llamas (de lado), escuchar un concierto en la Plaza Mayor, montarse en el Tren Blanco y descubrir q no sabías todo de Salamanca, tomar jeta en La Viga, jugar un futbolín en La Tuca
Tomar una foto dentro de Paniagua.
Jugar a la rana en la aldehuela,cruzar el Rio helado en bicicleta,bailar. En tartana,tomar algo en el rojo y negro,las famosas 158 horas de futbito en la horse
Pues sí, está claro que he de volver (otra vez), a ver si de una vez consigo un reportaje fotográfico como a mi me gusta, y vuelvo sin quejarme de nada 🙂
Un saludo!
Veo que me he dejado muchas cosas por hacer cuando he ido a Salamanca, habra que volver, aunque lo de la magia negra como que no, je je. Un saludo.
Y la nochevieja salmantina? Comer las uvas o gominolas antes de irse de vacaciones en la plaza más bonita del mundo
Sin duda es uno de los lugares que me gustaría visitar en un futuro no muy lejano, lamentablemente tengo que cruzar todo el oceano pacifico!!!
Sí que hay cosas por hacer en Salamanca, creo que no os habéis dejado ninguna en el tintero…Aunque para hacerlas todas habrá que ir a visitarlas por lo menos una semana 😉 ¡Un abrazo viajeros!
Me voy a Salamanca en fin de año, así que este post me viene fenomenal para no dejarme nada en esta ciudad. Por lo que veo, tendré un poco de todo: monumentos, cañas, paseos bonitos y vistas, que es algo que no puede faltar en mis viajes.
¡Enhorabuena por el post! 🙂
Te va a encantar, si tiene cualquier pega me avisas que viví 10 años alli, un saludo vecina, jajaja
Es imperdonable haber dejado sin citar una de las obras de arte más importantes que se pueden admirar en Salamanca, y que está a escasos 100 metros de la Plaza Mayor: los magníficos frescos de la cúpula del Liceo, un mural de más de 200 metros cuadrados pintado al temple durante cinco años en las que el artista plasmó la historia del teatro, que fue inaugurado por la Reina Sofía para celebrar la elección de Salamanca como Ciudad Europea de la Cultura 2002.
Otra muy mitica es ir a estudiar a zacut en.epoca.de.examenes y terminar mamao a las tantas en kandavia, bisu o ambigu con los apuntes en la mano o sino en la taberna de angel con los litros jaja
La visita que tengo pendiente para ver los frescos del Liceo, sin duda en mi próximo viaje.
Puede que los frescos de la cúpula del Liceo de Salamanca sean las mejores obras de arte contemporáneas con que cuenta Salamanca, las alegorías y metáforas que representan son dignas de exposición no sólo en el Liceo de Salamanca, sino en cualquiera de las mejores pinacotecas de todo el mundo, de hecho, hay obras del maestro-pintor que realizó estos frescos (José María Larrondo) en el Museo Nacional Reina Sofía y en muchos otros centros de arte de la máxima categoría, tanto dentro como fuera de España. No parece que los salmantinos sean muy conscientes de este tesoro artístico que tienen en su ciudad, ya que apenas dan importancia al Liceo en su propaganda turística, pero el tiempo pondrá todo en su lugar.
salir de fiesta y antes de ir al kandhavia(3,30am) comer unas patatas en el yunque…
Falta un imprescindible: tomar un vampiro/thriller en la Imprenta y entender el Ay Salamanca, qué hiciste?
Tomar unas jarras de cerveza en el Paniagua
Tomarse un litro en el campus exaditos en el cesped y la jeta de la viga
Soy salmantina aunque vivo fuera… Siempre que voy tomo leche helada en la alamedilla y compro unas obleas para traerme… Ummmm
El #9 lo cambiaría por tomarse un rojo en el bolero.
Y salir de pinchos y comerse una paloma! (De ensaladilla por supuesto)
Pues a día d hoy ,una nueva costumbre adquirida es ir a comer un Charrito antes d ir d fiesta, en El Pibe , cerca d la estacion d autobuses y d las facultades, es barato,llena un monton y esta buenisimo…s lo aconsejo a todos mis compis!!no s puede dejar d ir a probarlos antes d irse d Salamanca!!
Os ha faltado ir a darse un bañito al Aldehuela y quedarse en alguna de las terrazas de las casetas tomando una jarra bien fría de cerveza y sus sardinitas y es que nadie se acuerda de ir al Puerto de Chus???otro clásico de toda la vida de mi tierra charra
Emborracharse y bailar con La Tuna como si nádie estuviera viendo.
Comerse una hamburguesa del Átomo de Gran Vía al volver de fiesta.
Haber querido pero no haber visitado nunca el convento de Las Claras.
Tomar una mamada en la chupeteria.
Enrollarse con un/a guiri en el Irish Rover durante el año, y en Camelot en verano.
Envidiar a los guiris que se tumban el la plaza mayor.
Ir a los coches chocones.
Mear en el rincón (de mear) de la calle Especias (C toro a c Zamora).
Tomar un moruno del Bambú.
Acabar en el Ambigu (ambiente selecto… Todo notarios y registradores:-), kebab de al lado sin vocalizar mucho, y sentir el sol y el frescor de la mañana en la plaza mayor. Cafetito en terraza de la plaza.
Tomar un Cafe de empalmada en Los Escudos, plaza mayor.
Acabarte un bocata de El Yunque.
Litros en El Manzano.
Tomar una raqueta de Las Torres.
Saber donde esta(ba) Paulino.
Tomar una copa en El Subma(rino).
Flipar con que aun hay una tienda de Esterra.
Tomar churros de empalmada en el toscano.
Pasar por detrás de la «iglesia redonda» y tomar una tosta en La Tostita.
Saber que es «güisbur»
Caerse por las escaleras del Paniagua (sin soltar la copa)
Salir al balcón del Birdland
Mirar la fachada de la universidad y pasar de la rana.
Mirar la catedral nueva desde anaya y pasar del astronauta
Saber que Hernan cortes estudio en Salamanca. (también)
Dar una vuelta por Pizarrales y ver que (ya) no es tan chungo
Ir o haber ido a la hípica al Campo de Tiro.
Comprar un hornazo. (en La Industrial) o en Gil.
Saber (o pensar) que la Renault la quisieron poner en Salamanca.
Saber (o pensar) que los franceses se llevaron las estatuas de la catedral pero es mentira.
Saber que la torre de la catedral esta inclinada por el terremoto de lisboa
. Y que es el edificio más alto e la ciudad.
No saber que el verraco «ibérico» no es un toro sino un cerdo.
Saber que el casino del Tormes era una fábrica de harina.
Ver las fachadas pintadas del barrio del oeste.
Enrrollarte con/Enamorarte de un/a Erasmus en un botellón.
Beber una botella de agua de Babilafuente (y saber que es buena para el riñón)
Saber que en La Purísima esta la Inmaculada «de Ribera» , y no saber absolutamente nada más de ese señor. (ni su nombre. Hasta dudas si es con b o con v)
Visitar del sepulchro del arzobispo Fonseca en las Ursulas
Descojonarse de uno/a de fuera que dice Salamanques.
Conocer que «en Salamanca, la que no es puta, es manca»
Encontrar al onanista de la crestería del edificio de Escuelas Mayores de la universidad.
(y eso sí que es difícil, y no la fuc**** rana)
Salir mamao del Potemkin y aun así ir al Pippers, y acabar desayunando en el Via Libre.
Quisiera poder volver, y poder encontrarme otra vez con mis primos. Estoy haciendo varios amigos alli.
Hacer botellón en el San Francisco
ir a conocer salamanca y descubrir que hay paz y relax en la ciudad y la gente tan agradable. y sobre todo conocer al amor de tu vida ?
Mirar todos los nidos de ciguañales que anidan el los campanarios y qué son preciosos.
Comprar chochos dulces en la plaza en la pastelería la Madrileña…..pasear por el Tormes en barca….comer un picho de paloma en los bares de la plaza…comer jeta en la Viga…
Tomar un batido o zumo de frutas naturales en la terracita de CAFÉ ALADINO las noches de verano o un buen café contando tus cosas con tus amigos las noches largas de invierno …..no tiene precio…¡¡que recuerdos sus! !!!
Salamanca conoci en 2013 y quede maravillado. Su plaza mayor, su zona centrica tan bien conservada y valorizada, llena de historia, no hacen otra cosa que deslumbrar al visitante. Capitulo aparte para legiones de universitarios y su gran cantidad de bares. Un lugar al que desearia retornar
excelente el blog me sirvió mucho para matar la curiosidad , donde puedo encontrar los mejores bares del lugar por cierto _? creo que no menciona ninguno .
Buenas, el post habla de muchos de ellos, un saludo
Pero como que a Madrid, que pasa que el resto de España no viaja???